El 8 de enero de 2018, el semanario estadounidense The Nation
publicó un artículo que alertaba sobre la renovada voluntad de Estados
Unidos de abandonar el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
Entre las razones para justificar la decisión, se señalaba el rechazo de
las autoridades estadounidenses al contenido de un informe sobre la
extrema pobreza y los derechos humanos en EE.UU., realizado por el
Relator Philip Alston, que iba a ser presentado en la sesión del Consejo
del mes de junio. Efectivamente, en esta sesión, la número 38,
sucedieron ambas cosas: Alston presentó el demoledor informe denunciando
la realidad de la extrema pobreza en el autodenominado “país más rico
del mundo”; y Estados Unidos comunicó el día 19 de junio su salida del
máximo foro intergubernamental de Naciones Unidas para la protección de
los derechos humanos.
Sem comentários:
Enviar um comentário