La paradoja de los pueblos
indígenas ha sido sobrevivir a epidemias sin provocarlas, lo han venido
haciendo desde la llegada del Imperio español que trajo consigo la viruela, la
gripe y el sarampión que provocó el colapso de la civilización amerindia.
Además de resistir a otros “virus” sociales como el colonialismo, la esclavitud
y el racismo como formas de control, las epidemias foráneas han sido una
constante. La historia republicana, no fue la excepción a epidemias como la
fiebre amarilla, malaria o cólera focalizadas en población nativa y originaria,
que se alternaron con la explotación esclavista y extractiva como ocurrió en la
época del caucho, donde se calcula que murieron cuarenta mil indígenas y otros
miles fueron desplazados. Es tan grande la discriminación que hay poca
información sobre los impactos de infecciones foráneas a poblaciones indígenas
a lo largo de la historia de Perú y Latinoamérica.
Sem comentários:
Enviar um comentário