Footprints - Praia do Castelejo, Vila do Bispo, Algarve

quarta-feira, 18 de janeiro de 2017

A propósito de la derogación de la política “Pies secos/Pies mojados”

Desde que el 17 de diciembre de 2014 se inició formalmente el proceso de normalización de relaciones entre los gobiernos de Cuba y Estados Unidos, comenzaron también las elucubraciones sobre la fecha y las circunstancias en las que se producirían los cambios en torno a la política migratoria entre ambos países. La Ley de Ajuste Cubano, por ser la de más alcance y anclaje normativo, ha tenido el mayor seguimiento; al tiempo que la política de “pies secos /pies mojados” y el programa “Cuban Professional Medical Parole” también ocuparon lugar en el mapa de los cambios por venir.
El anticipo —fundamentado— de las transformaciones en, al menos, una parte de las regulaciones migratorias se verificó en los índices de llegadas de nacionales cubanos a las fronteras de Estados Unidos, una parte considerable en situación irregular. Entre el 2014 y el 2016 se duplicó la cifra de migrantes con ese destino y los últimos dos meses de 2016 recibieron a casi 10 mil cubanos en aquel país. El hecho, sin embargo, no es una completa novedad.
La noticia —cuyo anuncio se esperaba que coincidiera con la inmediatez de su aplicación, tal como fue— sucedió el pasado 12 de enero y comienza a generar abundantes opiniones y análisis sociopolíticos desde diferentes plazas públicas. Es posible que en los próximos días se produzcan miradas más analíticas de lo que es un cambio de considerable importancia para la normalización de relaciones entre los gobiernos y para las vidas de las personas que habían elegido la migración hacia Estados Unidos como camino individual y colectivo debido a razones de naturaleza económica, familiar o política.

Sem comentários:

Enviar um comentário