Footprints - Praia do Castelejo, Vila do Bispo, Algarve
quarta-feira, 31 de outubro de 2012
Vá-se lá saber porquê?
Esta noite, tenho a certeza que há deputados que irão dar muitas voltas na cama, antes de adormecerem.
É o peso na consciência! Aprovaram um OE que fará com que, muitos concidadãos passem maus momentos: desemprego, fome, miséria e, morte!
¿Un cupo para la Capilla Sixtina?
Los agentes de seguridad seguramente lo agradecerían. Cualquiera que haya estado en la Capilla Sixtina, en el Vaticano, se habrá topado con esos tipos en uniforme que se dedican, con escasa convicción y más escasos resultados, a acallar a los turistas y recordarles una y otra vez que no se pueden sacar fotos. No es para menos, ya que la sala donde Miguel Ángel pintó El juicio universal acoge cada año a cinco millones de visitantes. Demasiados, al menos según el director de los museos vaticanos, Antonio Paolucci, que, en declaraciones a La Repubblica, vuelve a lanzar la alarma sobre la conservación de la Capilla Sixtina. Entre las hipótesis que el Vaticano está barajando se incluye la posibilidad de establecer un número cerrado de personas que puedan acceder a la sala a la vez.
Manifestantes unidos em protesto contra OE2013
Movimentos ligados aos protestos de rua e estruturas sindicais concentram-se hoje, em frente ao parlamento, em Lisboa, para marcarem a votação, na generalidade, da proposta de Orçamento do Estado 2013, que acusam de "hipotecar o futuro" do país.
terça-feira, 30 de outubro de 2012
Domingo. Resaca. El libre albedrío
Asumirse como océano donde pueden acontecer grandes olas
y bancos de peces en realidad muy solitarios.
El verde más sobrenatural lo perderá todo porque en definitiva
[el Sol es quien manda.
y bancos de peces en realidad muy solitarios.
El verde más sobrenatural lo perderá todo porque en definitiva
[el Sol es quien manda.
El ejercicio de la libertad no existe pero habrá que disimular
— un hallazgo que a menudo sucede en la compra, en el baño —.
Lo posible es entonces manejar el volumen o tiempo que convienen
la exposición, el esponjado, la séptima dermis.
La resaca, por ejemplo, desviste la conciencia
y acontecen cosas así:
— un hallazgo que a menudo sucede en la compra, en el baño —.
Lo posible es entonces manejar el volumen o tiempo que convienen
la exposición, el esponjado, la séptima dermis.
La resaca, por ejemplo, desviste la conciencia
y acontecen cosas así:
Desde mi ventana el vuelo del primer pólen permite anticipar abril
y germino en la falda o infelicidad de esa mujer que carga niña,
periódico, domingo.
Luego subo al tren que toda calle propone hacia el pasado
y concluyo que la desgracia fue siempre el descrédito del amor
tras lo cual queda el paso a la ternura, el resfriado, la finitud con
su ausencia de liguero
Si no se aguanta la intensidad tres recados aseguran la poda de [una vida.
y germino en la falda o infelicidad de esa mujer que carga niña,
periódico, domingo.
Luego subo al tren que toda calle propone hacia el pasado
y concluyo que la desgracia fue siempre el descrédito del amor
tras lo cual queda el paso a la ternura, el resfriado, la finitud con
su ausencia de liguero
Si no se aguanta la intensidad tres recados aseguran la poda de [una vida.
Mucho más estimulante que el cuero, la cópula visible o anidar
[en la secretaria es saberse mortal y pretender compañía
Por mi parte prefiero negociar con la luz y recomiendo la elegancia
como férula y techo.
Pero hay mil maneras de ponerle la letra a este crimen.
En algunas latitudes se limitan a bailar.
[en la secretaria es saberse mortal y pretender compañía
Por mi parte prefiero negociar con la luz y recomiendo la elegancia
como férula y techo.
Pero hay mil maneras de ponerle la letra a este crimen.
En algunas latitudes se limitan a bailar.
Julieta Valero
Vá-se lá saber porquê?
Tenho de ir ao meu oftalmologista: não consigo distinguir se o PIN na lapela do casaco do Vitor Gaspar é a bandeira portuguesa, ou alemã?
El photoshop antes del Photoshop
Un hombre haciendo malabares con su propia cabeza, otro sujetando a once personas sobre sus hombros… Imágenes inverosímiles como estas ya existían a finales del siglo XIX. Se trataba de montajes extraordinarios que eran posibles gracias a una técnica más rudimentaria pero igual de efectiva que la que hoy, gracias a las nuevas tecnologías, está al alcance de cualquiera.
La pornografía según Edward Gorey
“Los plazos son tan fastidiosos”, explicaba Edward Gorey al periodista Paul Gardner de New York Magazine en una entrevista publicada en 1977. “Dibujé El curioso sofá en un fin de semana. Era una sátira de Historia de O. Hubo un impresor que se negó a imprimirlo. Incluso hoy sigo oyendo que hay gente de bien que sigue escandalizada. Pero los detalles de la fiesta en casa de Lady Celia se desarrollan en la mente del lector”.
segunda-feira, 29 de outubro de 2012
De raiva solta!
De regresso a casa, com as baterias carregadas, preparado para lutar contra o des(Governo) do meu país, com as únicas armas que possuo - o meu grito de revolta e, indignação, na rua, contra a corja que nos desgoverna.
Acordai Portugal, está na hora!
domingo, 28 de outubro de 2012
PÁJAROS FURTIVO
Se hielan los postigos
en esta noche densa.
Los árboles, distantes,
ofician su espesura.
La lluvia que te sigue,
el calor que has injertado,
recorren esta noche
de pájaros furtivos.
Se hielan los cristales
y es nada cuanto amaste,
nada la pátria que te acoge,
la voz con que recuerdas.
Manuel Moya
Vá-se lá saber porquê?
Arrefeceu bastante em Barcelona, ambientalmente falando; mantém-se quente a reivindicação independentista.
Temperaturas catalãs.
Temperaturas catalãs.
UN HOMBRE MIRA A OUTRO EN LA VENTANA
Un hombre mira a outro en la ventana;
a otro hombre sentado junto a otra
ventana silenciosa,
su mirada en la página y el aire
solemne con que lee ahora una línea
buscando un sol de invierno, unos caballos
galopando en la nieve, una mujer
hermosa e imposible y fugitiva,
la caricia del viento y la costumbre
o la detonación, el grito, el breve
latido en que la sangre se demora
suspendida y a punto,
y ahora si,
el temblor de la piedra sumergida,
el aliento que vibra y se desboca,
la ciudad que aparece en la distancia.
Un hombre mira a outro en la ventana.
Escribe unas palabras. No sospecha
—más allá de la sangre y los caballos
y el viento y la mujer y aquel latido—
que los trazos que araña en el papel
son los versos que el outro lee agora.
EDUARDO GARCÍA
Vá-se lá saber porquê?
Aproveitar o último domingo de sol do mês de Outubro, passeando pelas ruas do Bairro da Gràcia, em Barcelona!
sábado, 27 de outubro de 2012
PARA CELEBRAR TU SEXO
Para celebrar
tu sexo
una copa de champán.
Para besarte el aire que
te corre entre las piernas
(abismos indefinidos
sacrificios consumados)
unos labios vírgenes
que nunca antes
tocaran
piernas blancas
suaves
piernas perfumadas
con una rebelde perfección.
En el silencio
de tu pubis
en la humildad
de tu vulva
(pecado inmortal)
me gozo tranquila.
AURORA CUEVAS
Fantasia sobre um velho tema
Mora-me um poeta
Que tento esconder,
A ver
Se poderei ser
Como toda a gente.
Abri os meus alçapões,
E no último desvão
O fechei a pão e água,
Com grilhões,
E uma corrente...
(... a ver se poderei ser
Como toda a gente).
Depois, saí para a rua,
Todo aprumado,
Escovado,
Dado a ferro,
Satisfeito:
Porque em verdade, julgava
Que a multidão que girava
Pensava
De mim
Assim:
- "Ali vai um homem
Tão decentemente
Que, naturalmente,
Nada deve ter
Que nos esconder..."
Delirantemente,
De mim para mim,
Eu pensava assim:
- " Ser como essa gente!
Ser bem menos gente!
Ser mais toda-a-gente
Que toda essa gente!"
Sim,
Raivosamente,
Eu pensava assim.
... Tanto mais raivosamente
Quanto, dos longes de mim,
Do fim
Do derradeiro alçapão,
O Poeta emparedado,
Esfaimado,
Encadeado,
Cantava a sua prisão:
- " Se aqui me fecharam,
Foi porque não posso
Debulhar o osso
Que me arremessaram...
Foi porque os desperto,
De noite e de dia,
Com a chama fria
Do meu gládio aberto...
Foi porque a pobreza
Que fiz meu tesoiro
Tem muito mais oiro
Que a sua riqueza...
Foi porque horas mortas,
Indo no caminho,
Lhes bati às portas,
Mas segui sozinho..."
Eu pensava:
- " Sim, realmente,
Se te fechei, foi a ver
Se poderei ser
Como toda a gente..."
E baixinho,
Recolhido sobre mim
Como um bichinho-de-conta,
Eu cantava-lhe também,
Recolhido sobre mim,
Cantigas de adormentar:
Cousas de pai, ou de mãe,
Que cantam para embalar...
Assim:
- "Durma um soninho comprido
No seu bercinho deitado,
Que o papão foi enxotado,
E eu não deixo o meu querido...
Durma um soninho alongado,
No seu bercinho estendido,
Que eu não tiro do sentido
Velar o meu adorado..."
E assim, com tudo isto ao peito,
- Um doido e seu alçapão -
Eu seguia satisfeito:
Porque em verdade, julgava
Que a multidão que girava
Pensava
De mim
Assim:
- "Ali vai um homem
Tão decentemente
Que, naturalmente,
Nada deve ter
Que nos esconder..."
Como era que, de repente,
Nos olhos de quem passava
(Um qualquer)
Imaginava
Ver debruçar-se a acusar-me
Um colosso...,
Um poeta inofensivo
Com ferros nos tornozelos,
Nos pulsos,
E no pescoço?
Ai, campainhas de alarme
Sob dedos de outro mundo...!
E nem sei como
Transtornado até ao fundo
Dos meus alçapões recônditos,
Melodramaticamente,
Eu avançava
De braços todos abertos
Para o qualquer que passava.
Então,
Diante de mim, agora,
Qualquer, e não sem razão,
(Qualquer grosseirão)
Parava, ria,
Dizia
Que eu era doido varrido...
E, corrido,
Eu desatava a correr.
A multidão
Detinha-se para ver
Este senhor bem vestido,
Com bom ar e belos modos,
A fugir, como um perdido,
Ante o pasmo dos mais todos!
Sarcasta,
Bem lá do fundo
Do alçapão derradeiro,
O meu Cativo cantava
O timbre da sua casta:
- "Sou como um grito de alarme
Sobre as tuas sonolências.
Preencho as tuas ausências
Com a presença de Deus...
O som dos teus escarcéus,
Redu-lo a silêncio e a espanto
O murmúrio do meu canto
Nos teus ouvidos impuros...
Quero-te! e não são teus muros
Que hão-de impedir que te enlace,
E que te queime a boca e a face
Com meu ósculo de fogo...
Que trapaças de que jogo
Inventarás por vencer-me,
Se te rojas como um verme
Sem as asas que te hei sido?
E é de tal modo perdido
O afã de me combater,
Que é teu supremo vencer
Não vencer - mas ser vencido..."
... Cantava.
Mas eu, aos poucos,
Subjugava
Meus nervos loucos:
Retomava,
Da minha lista de cor,
Qualquer pomposa atitude...
Por exemplo: a de senhor
Fundador,
Ou benfeitor,
De associações de virtude.
E seguia
Com decência e autoridade,
Enquanto com desespero,
Com crueldade,
Com ódio,
Com soluços de paixão,
Gritava lá para dentro
Do derradeiro alçapão:
- "Não!...,
Não penses
Que te pode ouvir alguém!
Ouço-te eu; e mais ninguém!
Mas eu não te soltarei,
Nem deixarei
Que parem à tua porta.
Hei-de ter-te emparedado,
Carregado
De correntes;
E, por uma noite morta,
Hei-de entrar, como um ladrão,
E hei-de te cravar os dentes
No lugar do coração;
E hei-de te arrancar a língua;
E hei-de te queimar os olhos;
E hás-de ficar cego e mudo;
E assim,
À míngua
De tudo,
Te hei-de deixar
A agonizar por três dias...
Então,
Hei-de compor elegias
À tua morte:
Elegias académicas,
Sonoras,
Metafóricas,
Retóricas,
Feitas com todo o recorte,
Com toda a morfologia,
Com toda a fonologia,
Com toda a sabedoria
De versos caindo iguais,
Como um relógio a dar ais
À hora do meio-dia!
Depois, hei-de conservar
O teu coração escuro
Triturado
Por meus dentes,
Hei-de o conservar, pintado,
Retocado,
Envernizado,
Num frasco de cristal puro...
Para o mostrar às visitas,
Aos amigos e aos parentes."
Assim falando
Para dentro
Do subterrâneo nefando,
Ia andando
Com aspecto satisfeito,
E direito,
Bem seguro,
Sobretudo, consciente
De estar mesmo a ser, agora,
A parte de fora
(A cal do muro)
De toda a gente...
Assim entro em várias casas,
Através de várias ruas,
Parando ante várias montras,
Cumprimentando
Para um lado, para outro...
Até ficar
Numa qualquer sala
Onde estão sentados
Homens e mulheres
Com um ar de embalsamados.
Criados
Vêm e vão
Com bandejas
Sobre a mão.
Paira, como nas igrejas,
Um fumo de hipocrisia...
Enquanto
A um canto,
Com funda neurastenia,
Um piano faz ão-ão,
Faz ão-ão a toda a gente,
Como um pobre cão doente.
Logo,
Então,
Qualquer menina Marguerite
Me implora que lhes recite
A última produção.
Recuso-me,
Ela insiste,
Vou para o meio da sala,
Tudo se cala,
Sinto-me triste,
Falta-me a fala,
Falta-me a respiração,
E a suar de angústia, rouco,
Debuxando no ar gestos de louco,
Arranco, num grande esforço,
Estas palavras ao Outro...
Palavras
De todo o meu coração:
- "No silêncio total, contemplo-te. Morreu
A já póstuma luz dos astros mortos, no céu cavo.
Chegou a nossa hora! A realidade és tu e eu.
Contemplo-te, senhor!, eu, teu indigno escravo...
Os teus olhos serenos e cruéis
Despojam-me de toda a ornamentação:
E eu tremo, nu, sobre os meus tristes, preciosos ouropéis,
Nu - e coberto de confusão.
Lembro as minhas mãos vis, meus olhos lassos,
E a minha carne murcha, e o meu suor,
E os meus pés deformados, e as feridas dos meus braços...
Tem dó de mim!, belo senhor.
Continuas a olhar-me. Imperturbável,
O teu olhar transpõe minha nudez.
E, por mais que a teus pés eu me recolha, miserável,
A alma dói-me!, porque tu ma vês.
Como és assim cruel, sendo tão belo?
Tira de mim o teu olhar, que me tortura,
Macio e frio como o fio dum cutelo...
Poupa-me à tua formosura!
Ah, que martírio
Ter-te sempre tranquilo, grande, belo,
Posto em frente de mim, que sou delírio,
Ranger de dentes pouco sãos, riso amarelo...!
Vai-te da minha vista, meu amado!
Chama por mim o chão de que sou digno.
Deixa-me resignar-me! Estou cansado.
Só por pudor de ti me não resigno...
Deixa-me ir ver, lá em baixo, os saltimbancos,
Gozar o vil ballet que sobe à cena.
Deixa-me ir ocupar o meu lugar nos bancos,
Exibir o meu número na arena!
Deixa-me ser vulgar!
Pois se não posso ser o que tu és,
Por que assim me agarrar, e rastejar,
Como um grilhão, aos teus pés?
Triste impotente, em vão, dentro de mim, grito estes gritos:
Olho-te..., e quedo nu e mudo,
Porque os teus olhos nítidos e fitos
Se me antecipam a tudo.
E eu sei que não te irás, nem eu irei.
Pesa sobre nós dois a mesma condição:
Que eu nasci servo dos teus pés de rei;
Tu, pobre rei!, servo da minha servidão."
Calo-me, aflito.
Em roda,
Com um ar comprometido,
Dizem que sim, que é bonito.
Tangendo as pontas dos dedos,
Dão-me palmas
Com um meneio entendido
Das frontes estupefactas...
E a menina Marguerite,
Levantando as omoplatas,
Baixa, lânguida,
As pálpebras timoratas
Sobre a fímbria do vestido.
Ah!, eu sei!
Sei que ninguém compreeendeu,
Nem podia compreender,
O meu combate de amor:
Este diálogo entre mim e eu.
E arrumado para um canto,
Como o piano,
Gozo onanisticamente
A glória de ser vencido,
Gritando ao meu tal Demente
Lá no seu fundo escondido:
- "Venceste, porque és maior!
Porque tinhas de vencer!
Porque eu sou fraco,
Pois que te não posso ter
Calado no teu buraco!
Eu, afinal,
Sou uma triste mistura
De ousadia e cobardia.
Sou tu e eu...,
Sou banal!
Nem sou pele nem carne viva,
Não sei subjugar nenhum,
Padeço de alternativa,
Nunca me atinjo só um!"
...Enquanto ao lado, de esguelha,
Falando para um sujeito
Debruçado, como um cuco,
Sobre o seu ombro perfeito,
A dona de um alto peito
E duma boca vermelha
Diz:
- "Não parece antipático!
Não..., só maluco.
Talvez um pouco lunático..."
E eu, sentindo-me ridículo
Com o meu ar sorumbático,
Vou fechar-me num cubículo
Onde não haja ninguém,
E aonde a voz do Arcanjo preso
Lá dos fundos, alta, vem:
- "Por que me renegas, se eu é que sou Um,
E em te desdobrando, tu não és nenhum?
Por que me recusas, se não há batalha
Que, sem mim ganhada, possas crer que valha?
Por que deles todos me escondes aqui,
Se eu é que os sou todos, e te sou a ti?
Por que só exibes, sobre o teu portal,
Vis máscaras minhas...?"
Etc. e tal.
|
José Régio, As Encruzilhadas de Deus
Um país sob a ameaça de um serial killer com representantes do povo a bater palmas
Não tinha como fugir. A pornográfica cobertura mediática das jornadas parlamentares da coligação de direita obrigou certamente cada um de nós a ter de ouvir os grandes feitos de Paulo Portas na política externa¹ e aquele serial killer que se barricou no Terreiro do Paço a afirmar pausadamente que ainda está “por volta do 27.º quilómetro” da sua maratona.
Erro
Erro é teu. Amei-te um dia
Com esse amor passageiro
Que nasce na fantasia
E não chega ao coração;
Não foi amor, foi apenas
Uma ligeira impressão;
Um querer indiferente,
Em tua presença, vivo
Morto, se estavas ausente,
E se ora me vês esquivo
Se, como outrora, não vês
Meus incensos de poeta
Ir eu queimar a teus pés
É que — como obra de um dia,
Passou-me esta fantasia.
Para eu amar-te devias
Outra ser e não como eras.
Tuas frívolas quimeras,
Teu vão amor de ti mesma.
Essa pêndula gelada
Que chamavas coração,
Eram bem fracos liames
Para que a alma enamorada
Me conseguissem prender;
Foram baldados tentames,
Saiu contra ti o azar,
E embora pouca, perdeste
A glória de me arrastar
Ao teu carro... Vãs quimeras!
Para eu amar-te devias
Outra ser e não como eras...
- Machado de Assis
sexta-feira, 26 de outubro de 2012
Não Creio nesse Deus
Não Creio nesse DeusI
Não sei se és parvo se és inteligente
— Ao disfrutares vida de nababo
Louvando um Deus, do qual te dizes crente,
Que te livre das garras do diabo
E te faça feliz eternamente.
II
Não vês que o teu bem-estar faz d'outra gente
A dor, o sofrimento, a fome e a guerra?
E tu não queres p'ra ti o céu e a terra..
— Não te achas egoísta ou exigente?
III
Não creio nesse Deus que, na igreja,
Escuta, dos beatos, confissões;
Não posso crer num Deus que se maneja,
Em troca de promessas e orações,
P'ra o homem conseguir o que deseja.
IV
Se Deus quer que vivamos irmãmente,
Quem cumpre esse dever por que receia
As iras do divino padre eterno?...
P'ra esses é o céu; porque o inferno
É p'ra quem vive a vida à custa alheia!
António Aleixo, in "Este Livro que Vos Deixo..."
Não sei se és parvo se és inteligente
— Ao disfrutares vida de nababo
Louvando um Deus, do qual te dizes crente,
Que te livre das garras do diabo
E te faça feliz eternamente.
II
Não vês que o teu bem-estar faz d'outra gente
A dor, o sofrimento, a fome e a guerra?
E tu não queres p'ra ti o céu e a terra..
— Não te achas egoísta ou exigente?
III
Não creio nesse Deus que, na igreja,
Escuta, dos beatos, confissões;
Não posso crer num Deus que se maneja,
Em troca de promessas e orações,
P'ra o homem conseguir o que deseja.
IV
Se Deus quer que vivamos irmãmente,
Quem cumpre esse dever por que receia
As iras do divino padre eterno?...
P'ra esses é o céu; porque o inferno
É p'ra quem vive a vida à custa alheia!
António Aleixo, in "Este Livro que Vos Deixo..."
ÀS cinco da tarde
Às cinco horas da tarde |
Federico García Lorca
|
A CAPTURA E A MORTE Tradução: Oscar Mendes
Às cinco horas da tarde.Eram cinco da tarde em ponto.Um menino trouxe o lençol brancoàs cinco horas da tarde.Um cesto de cal já prevenidaàs cinco horas da tarde.O mais era morte e apenas morteàs cinco horas da tarde.O vento arrebatou os algodõesàs cinco horas da tarde.E o óxido semeou cristal e níquelàs cinco horas da tarde.Já pelejam a pomba e o leopardoàs cinco horas da tarde.E uma coxa por um chifre destruídaàs cinco horas da tarde.Os sons já começaram do bordãoàs cinco horas da tarde.As campanas de arsênico e a fumaçaàs cinco horas da tarde.Pelas esquinas grupos de silêncioàs cinco horas da tarde.E o touro todo coração ao altoàs cinco horas da tarde.Quando o suor de neve foi chegandoàs cinco horas da tarde,quando de iodo se cobriu a praçaàs cinco horas da tarde,a morte botou ovos na feridaàs cinco horas da tarde.Às cinco horas da tarde.Às cinco em ponto da tarde.Um ataúde com rodas é a camaàs cinco horas da tarde.Ossos e flautas soam-lhe ao ouvidoàs cinco horas da tarde.Por sua frente o touro já mugiaàs cinco horas da tarde.O quarto se irisava de agoniaàs cinco horas da tarde.A gangrena de longe já se acercaàs cinco horas da tarde.Trompa de lis pelas virilhas verdesàs cinco horas da tarde.As feridas queimavam como sóisàs cinco horas da tarde,e as pessoas quebravam as janelasàs cinco horas da tarde.Ai que terríveis cinco horas da tarde!Eram as cinco em todos os relógios!Eram cinco horas da tarde em sombra!LA COGIDA Y LA MUERTE
A las cinco de la tarde.
Eran las cinco en punto de la tarde.
Un niño trajo la blanca sábanaa las cinco de la tarde.Una espuerta de cal ya prevenidaa las cinco de la tarde.Lo demás era muerte y sólo muertea las cinco de la tarde.El viento se llevó los algodonesa las cinco de la tarde.Y el óxido sembró cristal y níquela las cinco de la tarde.Ya luchan la paloma y el leopardoa las cinco de la tarde.Y un muslo con un asta desoladaa las cinco de la tarde.Comenzaron los sones del bordóna las cinco de la tarde.Las campanas de arsénico y el humoa las cinco de la tarde.En las esquinas grupos de silencioa las cinco de la tarde.¡Y el toro, solo corazón arriba!a las cinco de la tarde.Cuando el sudor de nieve fue llegandoa las cinco de la tarde,cuando la plaza se cubrió de yodoa las cinco de la tarde,la muerte puso huevos en la heridaa las cinco de la tarde.
A las cinco de la tarde.
A las cinco en punto de la tarde.Un ataúd con ruedas es la camaa las cinco de la tarde.Huesos y flautas suenan en su oídoa las cinco de la tarde.El toro ya mugía por su frentea las cinco de la tarde.El cuarto se irisaba de agoníaa las cinco de la tarde.A lo lejos ya viene la gangrenaa las cinco de la tarde.Trompa de lirio por las verdes inglesa las cinco de la tarde.Las heridas quemaban como solesa las cinco de la tarde,y el gentío rompía las ventanasa las cinco de la tarde.A las cinco de la tarde.
¡Ay qué terribles cinco de la tarde!
¡Eran las cinco en todos los relojes!
¡Eran las cinco en sombra de la tarde!
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