El colapso financiero provocado por el estallido de la burbuja 
hipotecaria en Estados Unidos causó una reacción en cadena que derrumbó a
 las principales economías del planeta y dejó a millones de personas sin
 trabajo. A pesar de que muchos países volvieron a crecer, todavía 
padecemos las consecuencias políticas de la gran recesión, pese a que en
 este decenio se ha producido la mayor intervención pública para salvar 
el capitalismo y la democracia occidental, tal y como los conocíamos 
Sem comentários:
Enviar um comentário