Footprints - Praia do Castelejo, Vila do Bispo, Algarve

sábado, 22 de abril de 2017

“Pou la Gwiyann Dékolé”… después de Pascua

El fin de semana de Pascua ha terminado y las barricadas están de vuelta en Guayana. Desde las 22 horas, el lunes 17 de abril, las carreteras están de nuevo cerradas en el Departamento de Ultramar (el Departamento de Guayana es uno de los cinco Departamentos de “Ultramar” de origen colonial que están ligados, desde 1946, con la República Francesa de forma similar a las de los departamentos metropolitanos).
“Pou la Gwiyann Dékolé” ha hecho llegar un texto al ejecutivo de la metrópoli. Un protocolo que “constata” el plan de urgencia de mil millones de euros propuestos por el gobierno, propone abrir el diálogo sobre los dos mil millones suplementarios reclamados por los manifestantes y plantea dos condiciones no negociables con carácter previo a la reanudación del diálogo. En primer lugar, el ejecutivo deberá “constatar el hecho de que el pueblo guayanés quiere decidir por sí mismo”. Dicho de otra forma, que desea una consulta ciudadana sobre el futuro institucional del Departamento. A continuación, quienes protestan demandan que no se emprenda ninguna persecución contra los manifestantes que han tomado parte en el movimiento. Ello es una referencia a los controles de policía ordenados por la justicia desde el 14 de abril por las barricadas. Una posición muy aplaudida, el lunes a la tarde, desde la presentación del texto en Cayena. Pero una parte de la población guayanesa duda que el gobierno responda favorablemente a solo algunos días de la primera vuelta de la elección presidencial. (18 de abril de 2017, según RFI)
Sobre las brasas enrojecidas, dos grandes ollas hierven desde la víspera y cuando François Cavalier levanta la tapa con su machete, se escapan deliciosos aromas. Es un cocido de awara, el plato tradicional de Pascuas. A la pasta disuelta del fruto de una palmera se agregan legumbres y varios tipos de carne –buey, cerdo, pollo-. Entre dos ráfagas, sobre el carbet que domina la cala Balaté, un brazo del Maroni que se prolonga en la selva, los comensales disfrutan y la crisis social que sacude a Guayana desde hace un mes ocupa todas las conversaciones.

Sem comentários:

Enviar um comentário